Estar en la universidad puede ser una experiencia emocionante pero también abrumadora. Los horarios apretados, las largas jornadas en el campus y las limitaciones de presupuesto pueden dificultar mantener una alimentación saludable. Muchas veces, nos encontramos en situaciones en las que no tenemos tiempo para regresar a casa y cocinar, por lo que optamos por opciones de comida rápida o comemos lo que esté más cerca. A corto plazo, esto puede parecer una solución, pero a largo plazo, puede tener un impacto negativo en nuestra salud y bienestar.
Pero no te preocupes, estás en el lugar correcto. En este artículo, compartiremos una serie de consejos prácticos y saludables para ayudarte a mantener una nutrición adecuada, incluso cuando tienes poco tiempo y dinero. Estos consejos son proporcionados por estudiantes para estudiantes. No somos profesionales de la nutrición, pero estos consejos han funcionado para muchos de nosotros.
Desayunos Nutritivos para un Comienzo Energético
El desayuno es la comida más importante del día, y como estudiante, es esencial que comiences el día con energía. A menudo, el tiempo es limitado por la mañana, pero eso no significa que debas renunciar a un desayuno saludable. Aquí tienes algunas opciones:
Avena: La avena es una excelente fuente de carbohidratos y proteínas. Puedes prepararla la noche anterior y dejarla remojando para ahorrar tiempo. Agrega frutas y frutos secos para darle sabor y un toque extra de nutrición.
Desayunos Preparados: Si estás buscando una opción aún más rápida, económica y rica, considera productos como Yunno, que es un desayuno preparado que puedes tomar y llevar contigo. Es una forma conveniente de obtener una comida nutritiva sin perder tiempo, e incluso te permite tener tus cinco minutos más de sueño.
Colaciones Saludables
Entre clases y tareas, es común sentir hambre durante el día. En lugar de recurrir a bocadillos poco saludables, opta por colaciones saludables:
Frutas y Verduras: Lleva contigo frutas como manzanas o plátanos, o verduras picadas como zanahorias o apio. Estas opciones son ricas en vitaminas y te mantendrán saciado. Puedes prepararlo desde tu casa o buscar dónde comprar en tu trayecto, o en la misma universidad.
Palomitas: Las palomitas son una opción sorprendentemente saludable cuando se preparan sin exceso de mantequilla o aceite. Son una excelente fuente de fibra y son fáciles de llevar, además de ser deliciosas.
Meal Prep para la Semana
Una de las estrategias más efectivas para mantener una alimentación saludable como estudiante universitario es el meal prep, que implica preparar tus comidas con antelación, guardarlas en tuppers y las tomas ya preparadas al inicio del día, antes de irte a la escuela. Esta estrategia también suele ser más económica que comprar comida. Aquí tienes algunos consejos:
Dedica Tiempo los Fines de Semana: Los domingos suelen ser un buen día para dedicar a lo mucho una hora a preparar tus comidas para la semana. Planifica tus comidas y elabora un menú que incluya proteínas (como pollo, res, pescado o lo que sea de tu agrado), carbohidratos (arroz integral, papas, pasta) y verduras. Divide las comidas en porciones adecuadas para evitar el exceso de comida y el desperdicio.
Comidas Económicas y Caseras
Además de los consejos mencionados anteriormente, hay una joya culinaria que los estudiantes universitarios a menudo pasan por alto: las comidas corridas o "fonditas". Estos lugares ofrecen platos completos que incluyen un plato fuerte y dos guarniciones por menos de 70 pesos mexicanos.
La clave para aprovechar al máximo estas opciones económicas es elegir sabiamente. Asegúrate de equilibrar tu elección con verduras, carbohidratos y alguna fuente de proteína. Opta por platos que incluyan una variedad de ingredientes para asegurarte de obtener los nutrientes que necesitas. Por ejemplo, un plato con arroz, frijoles, verduras y pollo puede ser una opción saludable y económica. Estos lugares a menudo ofrecen opciones frescas y caseras que son una excelente manera de obtener una comida balanceada sin agotar tu presupuesto.
Así que, la próxima vez que busques una comida rápida y asequible, considera las comidas corridas o "fonditas". Son una alternativa inteligente que te ayudará a mantener una alimentación equilibrada durante tu vida universitaria. ¡Puedes organizarte con tus amigos e ir en sus horas libres!
Cena Ligera y Balanceada
Después de un largo día de clases y actividades, es importante terminar el día con una cena satisfactoria pero ligera.
Proteínas y Verduras: Opta por cenas que incluyan proteínas magras como pollo o pescado, junto con verduras frescas, o algún carbohidrato ligero. Por ejemplo, unas simples quesadillas con queso panela o verduras o también una ensalada con pollo son opciones rápidas y saludables.
Moderación y Sin Satanizar Alimentos
No se trata de eliminar por completo tus comidas favoritas, sino de disfrutarlas con moderación. Mantén un equilibrio en tu dieta, incluyendo una variedad de alimentos para asegurarte de obtener todos los nutrientes necesarios. La vida universitaria puede ser estresante, y a veces, los hábitos alimenticios pueden verse afectados. Si sientes que tu relación con la comida se está perjudicando, busca ayuda. Muchas universidades ofrecen servicios de salud mental gratuitos. No dudes en contactar a un profesional si necesitas apoyo para manejar tus hábitos alimenticios y emociones relacionadas con la comida.
Así que, la próxima vez que te enfrentes a la elección entre una comida nutritiva o una opción menos saludable, recuerda que dedicar cinco minutos más a tu alimentación puede marcar la diferencia en tu bienestar. Comer bien no solo te hará sentir mejor físicamente, sino que también tendrá un impacto positivo en tu energía, concentración y estado de ánimo. Dediquemos ese pequeño tiempo extra a preparar comidas saludables y a elegir opciones nutritivas cuando estemos en la escuela. No se trata de privación, sino de auto cuidado.
Recuerda, eres el protagonista de tu historia y tu salud es un capítulo importante en ella. Así que, adelante, toma el control de tu nutrición y siéntete mejor física, emocional y académicamente. ¡Come bien y prospera en tu viaje universitario!